RESPONSABILIDAD SOCIAL EMPRESARIAL

Responsabilidad social empresarial
Respaldo ante cualquier eventualidad
Tener una póliza de seguro siempre será necesario, ya que están diseñadas para brindar una cobertura a sus usuarios como mecanismo de prevención, el cual puede ser útil como una forma de proteger su patrimonio a lo largo del tiempo y ante cualquier eventualidad.
Proteger el patrimonio y la continuidad del negocio
Contar con una buena cobertura es la solución más fiable y practica para resolver lo antes posible cualquier incidencia que se presente en una empresa. Una póliza que asegure su patrimonio ante daños, responsabilidades, construcción e incluso a los contratos que suscriba, puede evitarle grandes preocupaciones.
Transferencia de riesgos a un tercero
El éxito de una compañía depende en gran parte de cómo planea y transfiere sus riesgos. En este caso, la aseguradora cuenta con mecanismos de protección que aseguran la continuidad de sus operaciones y aminoran cualquier repercusión desfavorable.
Proteger a sus empleados frente a posibles riesgos laborales
El hecho de que sus empleados sepan que están protegidos ante cualquier imprevisto o accidenten, los hace trabajar de forma más eficiente, confiados y tranquilos.
Proteger el capital de trabajo
Los seguros son una herramienta que tienen las empresas para prevenir un desequilibrio económico y consolidar su viabilidad.
Protección jurídica
Tener un seguro le permite acceder a una garantía para cubrir los gastos generados por el asegurado al participar en un procedimiento judicial o administrativo. Su finalidad principal es asesorar y defender al individuo ante reclamaciones o problemas por vía amistosa o legal.
Indemnizamos los perjuicios causados por el incumplimiento de las obligaciones derivadas de un contrato entre particulares.
Amparo de anticipo: Ampara al asegurado sobre los perjuicios por el uso indebido que el garantizado haga de los dineros en calidad de anticipo.
Amparo de pagos anticipados: cubre al asegurado frente a los perjuicios derivados del no reintegro por parte del garantizado, del saldo a su cargo.
Cumplimiento de contrato: cubre al asegurado por los perjuicios directos derivados del incumplimiento del garantizado sobre las obligaciones del contrato.
Pago de salarios: prestaciones sociales e indemnizaciones: cubre al asegurado contra los perjuicios del incumplimiento de las obligaciones laborales con las que está obligado el garantizado con el personal empleado en la ejecución del contrato.
Calidad de los elementos suministrados: cubre al asegurado frente a los perjuicios imputables al garantizado derivados de la deficiente calidad de los elementos o bienes suministrados por el garantizado.
Calidad del servicio: cubre al asegurado contra los perjuicios imputables al garantizado derivados de la mala calidad del servicio prestado.
Correcto funcionamiento de equipos: cubre al asegurado frente a los perjuicios imputables al garantizado, derivados de las deficiencias técnicas en el funcionamiento de los equipos suministrados o instalados.